Archivo de la categoría: nueva sección

Tras la senda del que mete tiros en los sesos de los Elefantes

Querido «abuelo», quiero escribirte con la humidad, mejor dicho, con toda la humildad que me sea posible y hábil hacerlo…

Y es que llevo días leyendo los periódicos atrasados que me traen, antes de usarlos para las labores domésticas del empapelao tras el fregao, o para las recogida de las cacas de mis animales (suerte que cagan duro!), bueno, esto es esporádico porque no hay periódico para tanto… A lo que iba, te he querido llamar «abuelo» por respeto, y es que deseo que sea esto lo que se remarque ante todo: el Respeto.

La verdad: leyendo tu historial de fracturas de cadera, operaciones, caídas y demás soponcios donde te quedas alhelado o sales dando manotazos con mala leche a tus subordinados, aunque sea ante el público del «país» entero…. Juáaaas! y es que me hace hasta gracia, abuelo, ni te lo imaginas. Cómo me gustaría verte dando cogotazos al gallardón de los cojones, que para eso ya tienes tus años, y en vez de adorarte como a buen sabio, te decrepitan y se preguntan por los medios, cómo coño no dejas ya el cargo. ¿Es por tozudez, abuelo? A mí, la verdad, me importa un bledo que estés como que no, no soy asistente ni de este país ni del otro. Como la canción dice: No soy de aquí ni soy de allá… Entiéndase bien lo que digo, y es que collons, hasta eso del separatismo de la cataluña endulzaina me importa un bledo, porque de eso se trata: de mantener alelao al pueblo con tanta directiva que si paquí que si pallá… Es un modo de alejar los problemas de-veras de las mientes de los que todavía cotizan a la ha(z)ienda pública o caja de las moneditas de ellos. O sea su hucha, su caja fuerte de los amores, de la que viven toítos ellos y vosotros y vosotras, sus graciosas majestades.

Hablando de «majestad», no sé de dónde se sacaron el título, tampoco sé bien bien de dónde proviene el latifundio de «rey» de algo, salvo que son títulos de empoderamiento de las cosas y de las gentes que, todavía (algunos), sueñan con ser príncipes o princesas de algo… en fin, que se lo pregunten a la difunta lady dy, quién más que si no ella supo en su momento que el auténtico rey era sólo uno: el DINERO.

A lo que iba abuelo, y es que me saca un poco de mis cosas el oír o leer que por qué no abdicas ya ¡coño! Sólo falta que te digan que estás chocho, como corresponde a tu edad. Y es que, no nos engañemos, para los de este mundo esto de la edad no corresponde ni en grado, con el grado de sabiduría que pueda llevar la edad… Bueno, en gran parte llevan gran parte de la gran parte de la verdad, para qué nos vamos a engañar: cuanto más viejos, más malhumorados, más chochos, más pellejos, más egoístas… ah! si yo te contara abuelo lo que me encontré por ahí en mis andanzas de vendedora puerta-a-puerta, o sea la que toca los cojones al timbre a la hora la siesta o la comida. Pues sí, abuelo, tengo que reconocer que a los que más les importa un bledo todo es a vosotros (ojo, que a mí ya no es que me falte mucho, ya no soy una jovenzuela, pero me fijo mucho en las bocas torcidas pa-bajo de los viejos y las viejas, pocos veo de sonrientes), pues eso: que a nuestros «mayores» les importa un carajo los que vienen detrás y los que lo están pasando de apuro: «¡que se jodan, que yo cobro!», piensan y manifiestan. ¡Ah, si no fuese por esas pensiones, os iba a importar un bledo soltar cuarenta que diez!!!

Sí, ya lo sabemos: ahora los soberanos son esos que cobran sobrepensiones, cuyos restos guardan, cuidadosamente, en la caja de su banco o de sus bancos, hasta compran acciones y demás planes (¿de futuro pa la tumba de un futuro?)… muchos, por cierto, se han ido al carajo con algunas «entidades» (nunca mejor dicho).

Bueno, abuelo, esta apoteosis es para decirte que: ni te odio ni te apoyo, tampoco te amo ni te tengo en reverencia alguna, pero sí que me hacen gracia tus salidas, porque pones en claro compromiso a parte de este socinmundo… y es que, seamos Francos, les das vergüenza. Por tanto, te digo, abuelo, que se sepa bien alto y bien claro: que si bien has servido para servir como comidilla en tus huidas a las estepas para matar a mis Hermanos los Elefantes y demás Hermanos que se te hayan cruzado por delante, ¿por qué no has de seguir en tu puesto, hasta que te salga de los güevos, o bien que te quedes dormido encima de una tarima, o te caigan las babas en los micrófonos y en los papeles de tus apuntes paldía?

Te animo, pues, a que per-sistas y estés hasta que te caigas definitivamente, para que así sepan, los muy atontaos que te secundan y te protocolizan, que ellos, sin Duda Alguna, también llegarán a tristes viejos… y por descontado, abuelo, que tanto ellos como tú llegaréis a donde vamos todos, desde los gusanos hasta los más honrados y hermosos Cerdos.

Otro día, te prometo, te cantaré a lo Quevedo, de momento me quedo con tus propios chistes y meteduras de protocolos hasta el  mismo culo.

Españistán desde Taiwán

¡Si es que somos el copón!!!!
Hasta un Niño de Biberón puede entender lo siguiente, hasta el muy majete, seguro que se descajona y se hace pipí en el pañal de la risa!!!!

Llenos de R-regocijo están en la «casa del ¿señor?»

Fumata blanca en el Vaticano

¡Ay, no, perdón, es la siguiente! ¡Qué lío con el humo, no… si digo yo es que fuman demasiado… sí, pero ¿qué? !!!

¡¡¡Habe-mus papa Paquito!!!

 Pues sí, por fin, los cató-licos, están que no caben en sí de gozo y de Speranza pura y ecuánime, dada la juiciada razón que les ha impulsado a votar a un papa, que si no negro de piel, sí lo es por la enunciación de la orden papal (o como se llame, que no estoy muy puesta en eso de esas jerarquías) del papá-negro-y-olé…

¡Por fin un Jesuita! Pero… ¿jesuita no viene de Jesús? ¡Ay Dios mío! y es que hasta en la «casa del señor» tienen entrada y habitación los jesuitas y los papables de toda condición.

En fin, ni me causa pena ni regocijo, pero sí, hay una parte de mí que se entristece, y no por esa triste curia y saga y saga… y saga… aunque hay otros que botan de alegría porque dicen que se está cumpliendo la profecía del Nostradamus, con lo cual poco le queda ya a esa iglesia bendita y bendecida por los millones y las industrias que promueven sus bancos y demás secuelas por ahí infiltradas, que son muchas, demasiadas, con lo cual (juro) que me siento culpable de denunciar a manipuladores y a sectarios y a sectas de poca monta, ya que comparada con esta industria manipuladora de las conciencias, las almas y las mente, y… sobre todo de los bolsillos ajenos, esas sectas de poca monta, de poca monta son, y, realmente, deberíamos alabarles por lo humildes de su condición…. ¿dónde va a parar, por dios!!?

A lo que iba: triste me siento, hasta el punto de la congoja espiritual, ya que, como siempre se puede comprobar que los pardillos andan detrás de los representantes-legales-de-dios, y hasta incluso se sienten, por fin, como en casa, pensando y diciendo: ¡por fin un humilde «como nosotros», que reza el padrenuestro y el avemaría que nos acompañan en los caldos y almuerzos! — Sí, realmente me hace sentir triste que tengan tantos seguidores y que estos ciegos seguidores no vean el cambio de estrategia de esa empresa: llámese vaticano-pontificado-sacralizado.

Lo peor, de lo peor y peor: espero que no lo comparen con Jesucristo el Nazareno ¡por dios!

Y es que ya se sabe: cuando el dormitorio matrimonial huele mal debido a los malos usos que se realizan en el lecho conyugal, mejor abrir las puertas, ventilar, tirar el camastro y comprar colchones y cobertores nuevos, y si tan mal se pone la cosa porque hay críticas fuera-dentro-y-en-la-medianía, pues aparte de lo nombrado, mejor se pinta el cuarto y se alquila a otro, para olvidar el mal nombre de lo que allí se cocía dentro. Con eso el «pueblo» ya está tranquilo y satisfecho: se ha hecho Justicia Divina, y los males van a ser ¿descompuestos? ¿reciclados? ¿triturados? o van a ser metidos en containers y enterrados en ¿África? o arrojados a sus océanos.

Bien, que no se diga que esto es una crítica hacia nadie en concreto, ya que yo en esos lares poco me presento, y mucho menos me atrevería a pisar tales alfombrillas, mi condición y entereza personal, mejor dicho, mi Ética me lo niega a nivel estomacal. Antes que eso visitaría lugares más propicios y entablaría amistad-incondicional-y-amorosa con cualquier desheredado de la calle, porque para mí, ellos son los únicos representantes de eso que llaman «dios»-todopoderoso, que… ¡anda, vaya título eso de «todopoderoso»! debe ser para que nos enteremos bien Quién manda y Quién dispone la ley de los sociales-humanos.

Este post es sólo una pequeña reflexión que no se anda por las ramas de los eucaliptos por ser éstos muy altos, sino por las ramas de los olivos, más longevos y bajitos y que encima dan más de la cuenta:

Esa institución tiene millones de fieles y ciegos seguidores marcados por algo llamado Fe, una Fe que no encuentran en ellos y que, por tanto, necesitan depositar en un representante Fuerte y bien Entronado. Si este representante da muestras de ir «más o menos» bien (pero parece ser que éste también tiene su historia allí por la sudamérica latina), entonces alaban y entonan los salmos a dios todopoderoso para que les perdone los pecados, les colme de bendiciones y no se olivde de ellos a la hora de ir (por si acaso) de cabeza al infierno.

Sí, penoso, ahora sólo nos falta que haga su aparición ¡tachán! el anticristo!!! — Sniffff esto ya es demasiado para mis neuronas.

Porfa: Dios Creador Auténtico de la Creación TodaElla, cuando me vaya, júrame, por todos tus Socios, que no voy a volver aquí NUNCA MÁS…. ni por muy lanzada que sea, no me hagas caso: NOOOOO!!!

PD, como sigamos así, me voy a hacer seguidora de Osho (tengo que reconocer que expresa Sabiduría y no letra impertérrita y tiesa), tengo que reconocer que cada vez me mola más-mazo!!! Un abrazo Osho

RequetePD: éste entra con mucha faena: limpiar el vaticano va a llevar océanos de agua… pero yo creo que van a dar la excusa de que es mucha agua y hay que conservarla para los tiempos venideros. Que sí, que si hay «inocentes» que todavía «creen» en esos señores bien aposentados, que viven de lo lindo y que predican cosas rancias e inexistentes, olvidándose, eso sí, sin olvidarse de la cruz, de un tal J. de Nazaret, que por cierto, cada vez se encuentran más y más paralelismos con viejos y antiguos Sabios de muchos lugares… sí, demasiados paralelismos, y es que es muy posible que la historia del Nazareno la hayan súperadornado y súpermaquillado los mismos redactores de los evangelios, haciendo notar y poniendo notas clásicas de cuentos boca-oreja (ya que antes pocos escribían y menos sabían de grafías complejas) coincidencias que ya existían como creencias a lo largo de los tiempos institucionalizados de la humanidad como sociedad tal.