Archivo diario: 30 de septiembre de 2020

Una de epidemias…

Me maravillo sobre algunas páginas, la capacidad que tienen algunas personas para TRANSMITIR…

Esto es muy corto. Si no sabéis inglés podéis usar el traductor automático.

La página es la siguiente, y como me ha asombrado, os la transmito. Viene desde Alaska.

The Law of Nature

 

El enlace es directo.

 

Ahí, ya os sale la página entera para traducir a través de Google o Traductor de Páginas. Gracias !!!

 

El Arte de saber Relativizar

Saber relativizar no es lo mismo que simplificar.

Somos seres casi bipolares, muchos, incluso, bipolares total. Siempre peleando, luchando contra «un@ mism@». Así es muy difícil que salgamos sin heridas de ciertas cuestiones, encuentros, desencuentros, luchas y batallas que nos prepara, más que la vida: esta maraña de mundo en el que nos encontramos metidos, muchos cabeza abajo en un pozo donde tan siquiera se puede percibir la luz, sino una humedad maldita y criminal que nos hace sentir que la vida ni tiene sentido, que debemos refugiarnos dentro de nosotros mism@s, y para ello inventamos y sacamos cosas de donde no son: desde teorías, frases que ni siquiera son atribuibles a personas notables*, quizás esta postura nos conforte, más si las pubicamos por «redes» o por ciertas partes… ya que a través de la aprobación de terceros o, baste con que esto salga de nosotros mism@s, produzca un alivio temporal sobre situaciones, o graves o no tan graves pero que solemos arrastrar a la larga y que siempre están ahí: tarde o temprano surgen como los monstruos negros que llevamos en nuestro interior y que están dispuestos a decapitarnos, de un momento a otro.

Por lo general, solemos generar auténticas BATALLAS CONTRA NOSOTR@S MISMOS, llegan ahí los desencuentros más crueles que nos hacen recular y terminar por encerrarnos en nostros mismos, son batallas, además que no dan retaguardia y donde lo más probable es que siempre perdamos contra nosotros mismos. Porque es, se trata, en sí, de una BATALLA, una guerra cruel, nunca se trata de una revisión o un tratar de «comprender» para relativizar, para llegar a un acuerdo con nosotros. Yo le llamo DIGERIR. Y esto, por supuesto, no tiene límites, siempre a lo largo de nuestra vida VAMOS DIGIRIENDO, APRENDIENDO si es que lo llegamos a digerir de esa forma: APRENDER DE NOSOTROS Y DE LOS DEMÁS, de quienes pulsaron el botón rojo y el por qué lo hicieron en nostros mismos, y por qué la bomba nuclear nos estalló en pleno corazón o cerebro…

¿Por qué hay detonadores que están por ahí escondidos y que en un momento determinado surgen y a los que solemos dar sin intención alguna, simplemente «por qué había que pulsar en un momento determinado y no en otro»? No creo, que, a la larga, esto signifique un misterio, simplemente hay «cosas», hechos, sentimientos que permanecen en nosotros y que al andar sobre terrenos (peligrosos o no), pisamos, sin querer los detonadores. Incluso, a veces, nosotros somos los detonadores que hacen que los demás estallen, por supuesto.

Por eso es tan importante sabeer que RELATIVIZAR es imprescindible en el momento oportuno… Porque si no se sabe relativizar, seguramente terminaremos por poner otro esparadrapo más sobre heridas profundas y graves que nos pueden, incluso, llegar a enfermar, incluso entrar en depresiones, quien no sepa poner cada cosa en su sitio. RELATIVIZAR no es despreciar, en absoluto, ni el hecho ni a la persona tercera o terceras personas, tan siquiera a nosotros mism@s. Hay que tener esto en cuenta y muy presente, porque si lo que hacemos es RELATIVIZAR BANALIZANDO, entonces lo que hacemos es DESPRECIAR el hecho, la persona o personas, las cuestiones, las circunstancias y a nosotros mismos, y entonces también se corre el peligro no de caer en superficialidades y cerrar heridas profundas de un modo superficial, sino que caemos en el burdo saco de un EGO material que lo que pretende, en el fondo, y para que no nos sintamos heridos: RELATIVIZAR BANALIZANDO y DESPRECIANDO A LOS DEMÁS. Ahí el ego juega, también, un papel muy importante: SENTIR QUE LOS DEMÁS SON LOS PEORES, LOS MALOS, LOS INÚTILES, LOS VACÍOS, LOS IMBÉCILES, LOS «NIÑATOS», LOS IGNORANTES…, con eso ya nos hemos puesto no solo un esparadrapo, sino nos hemos puesto una MEDALLA CONMEMORATIVA A LA ESTUPIDEZ PERPETUA…, pero no importa, lo que importa es el brillo temporal de ese oro falso que nos ha hecho salir de una situación en la que nos veíamos y nos sentíamos envueltos y que nos estaba haciendo daño y sentirnos mal, por supuesto… Esto forma parte, también, cómo no, de la auto-defensa, de no querer rascar en una situación en uno mism@ o en un tercer@, naturalmente no hay que rascar para destruir, sino para averiguar y a partir de ahí, hay que llegar a un CONSENSO con un@ mism@ y con el tercero…, para bien o para mal, aunque por lo general, si sabemos RELATIVIZAR en armonía y lucidez, toda situación llega a EQUILIBRARSE, entra en ARMONÍA, incluso RESTABLECE RELACIONES IMPOSIBLES DE SOSTENER.

En este post, lo que quiero es llamar la atención sobre EL ARTE DE SABER RELATIVIZAR…, y esto conlleva no herirnos a nosotros mismos, y por supuesto ni herir a los demás y no matarlos a cuchillo ni a espada, por supuesto no hay que usar una guillotina, jamás… Porque son esas mismas armas las que más pronto que tarde, girarán y terminarán (o terminaremos, mejor dicho) con nosotros mismos.

Se trata de RELATIVIZAR a través de TODO LO POSITIVO…, aquello que nos ha hecho despertar esa situación, ese individuo…, jamás para destruirnos sino para saber que: LO QUE DESPIERTAS es algo que ese «otr@@ necesita que le despiertes, aunque sea de forma inconsciente…, su necesidad de sentirse «vivo», nunca mejor dicho, aquello que necesita hacer fluir de forma espontánea y que ha tenido que meter en un saco oscuro hasta hacerlo pudrir definitivamente… No, el ARTE DE SABER RELATIVIZAR implica AGRADECER lo mejor que también ha despertado en nosotros… quizás unos sentimientos, siempre vivos, quizás aquello que hemos anhelado siempre y que hemos enterrado en un cementerio oscuro…, quizás aquella parte que siempre ha estado ahí quieta pero atenta…, porque esa parte subconsciente o inconsciente, aunqeu creamos que no existe: SIEMPRE ESTÁ AHÍ, dispuesta a darnos una patada en la espinilla, una bofetada en la cara, un hálito de cariño o…., ¿quién sabe qué…?

Por eso es tan importante el SABER RELATIVIZAR POSITIVAMENTE…, agradecer aquello que os ha hecho sacar algo a la luz, para perpetuidad o para algo temporal, no importa… Como seres vivos que somos, pues, aunque a veces sea peligroso, reconozco que andar por ahí con las ventanas y puertas abiertas de nuestro Templo, nuestra Alma, nuestra Existencia atrae muchas cosas, mucha gente, incluso a otras gentes que pueden aborrecer precisamente eso: IR COMO DESNUD@S por la vida, o despistados como un Rompetechos existencial que no sabe con lo que se topa, muchas veces, y confunde demasiadas otras… Bueno, tampoco hay que sentirse mal o culpables por lo que hacemos, simplemente hay que SABER QUE NO HAY QUE LUCHAR CON NOSOTROS MISM@S: EL ARTE DE SABER EQUILIBRAR NUESTRAS CARGAS POSITIVAS Y NEGATIVAS, SABER RELATIVIZAR para aceptar, ¿por qué no? hasta incluso con AMOR todo aquello que nos provoca, que nos hace sentir mal, que hasta puede que se nos haya colado dentro… Cuando se sabe RELATIVIZAR, ESTAMOS AMANDO EN PROFUNDIDAD, NO SOLO A NOSOTR@S MISM@S, sino también a los demás…

Voy a poner un ejemplo: Imagina a alguien que incluso, en un momento determinado de su vida, ha llegado a pensar y creer que ha sufrido de mal de «Edipo»…, esto sucede, puede suceder… Alguien que ha amado a su padre o a su madre sin saber delimitar bien los extremos… Ese «alguien» en un momento determinado, atrae a una persona, que, sin conocerla físicamente, choca con él o con ella. Se trata de una persona, naturalmente, mayor que él o ella… Eso desencadena un movimiento, un flujo terrible, principalmente en quien lleva toda esa reseña y resaca interior… Cree que ha encontrado a la «persona de su vida»… Cuando esa persona le dice que es mayor que él o ella, entonces… recula, se da cuenta que ahí pasa algo… que no sabe bien, bien qué es o de qué se trata… Vuelve a rememorar cosas de su pasado donde ha estado metid@ como en un pozo, lleno de sufrimiento, porque no sabe si, realmente, ha sufrido de mal de «Edipo»… Esto es solo un ejemplo, amigos y amigas… El resto lo ponéis vosotros y vosotras… Es un ejemplo un poco extremo, lo sé, pero se dan casos como estos, sobre todo en esto que yo llamo con más frecuencia las «marañas» sociales, que no redes… Hay que tener, pues cuidado, y, en primer LUGAR JAMÁS HACERSE DAÑO A UNO MISMO, LUEGO SABER DE QUÉ SE TRATA Y POR QUÉ, Y LUEGO, SABER ACOGERSE

AL ARTE DE SABER RELATIVIZAR

Esto es aceptar que todo esto ha sucedido, que esa persona que nos ha pulsado el botón o que nos ha dado la patada en la frente, quizás no haya tan siquiera despertado ese mal complejo herida con el que nos hemos rebanado a tiras a lo largo de nuestra vida. Simplemente, puede que… quizás esa persona que nos ha dado el pisotón esté liberando otras cosas positivas: LA SABIDURÍA, LA PACIENCIA, LA ACEPTACIÓN, LA ARMONÍA…, quizás tan siquiera sea que esté reventando ese «complejo», sino que quizás lo que hemos necesitado a lo largo de nuestra vida es a ESA PERSONA MISMA…, que con TEMPLANZA va, quizás, a poder entrar EN NUESTRAS VIDAS… Esto es RELATIVIZAR CON ARTE Y CON AMOR MISMO… SABER ACEPTAR Y SABER BAJAR LA CABEZA CON HUMILDAD ANTE LO QUE LA VIDA NOS PROPONE Y NOS HA PUESTO EN EL CAMINO…

Aceptarlo o no ya depende de nosotros… quizás dejarlo, pero esto también requiere el arte DE SABER RELATIVIZAR para no herir-nos ni herir a los demás… Los caminos son inmensos… pero ya, a través de este ARTE habremos aprendido… y quién sabe… quién sabe… los CAMINOS, mientras VIVIMOS, son infinitos y, si realmente necesitamos vivir algo en profundidad o algo en concreto, tranquil@s, que tarde o temprano por la «ley de la Rueda existencial», volverá a ponerse en nuestro camino o en el camino del otr@, siempre y cuando en verdad NECESITEMOS VIVENCIAR ESA PARTE EN NUESTRA VIDA.

 

SALUD, CONCIENCIA,
SABIDURÍA Y SABER QUE NUESTRA VIDA
ES UN ARTE EN SÍ MISMO
CUANDO LA SABEMOS APLICAR.

Hasta luego, amigos y amigas!!!

NOTA FINAL: SALGAMOS, LA VIDA ESTÁ AHÍ FUERA, QUIZÁS A LA PUERTA DE TU CASA, EN EL BARRIO DE TU CIUDAD, EN UNA TIENDA, EN UN PARQUE, QUIZÁS EN ALGUIEN QUE NOS LLAMA, EN ALGUIEN QUE CONOCEMOS… Nunca olvidemos que, cuando sentimos que alguien, en verdad, toca a nuestra ventana o intenta entrar por nuestra puerta, si de verdad nos mueve algún hilo: jamás hay que dejarla escapar … hasta que no hemos saboreado, aprovechado o incluso compartido ¿por qué no?, todo lo que la vida nos quiere regalar. De eso se trata pues: de un regalo y no de una trampa… ESO ES EL ARTE DE SABER RELATIVIZAR. Gracias !!!

——- ——- ——–

(*) Cada vez hay más cosas de estas en las «redes» o marañas sociales, como yo le llamo. No dejo de quedarme de «pasta de boniato», cuando se atribuyen frases, comentarios, dichos como Sentencias ejecutorias y que atribuyen desde a Froid, Gibran, Einstein y otros de las antigüedades… Hay que tener mucho cuidado con esto, por supuesto, porque terminamos creyendo que sentencias simples o que son sacadas a colación, pertenecen a quienes dicen que pertenecen –valga la redundancia–, y desde esto hasta sacar «malos chistes», peores dichos y demás «dires y diretes». Por lo tanto, aconsejo, desde mi perspectiva humilde como ser humano, que si se tiene la oportunidad, se compruebe la procedencia de tal frase, y, por supuesto, si ya se huele la simplicidad o simplismo, jamás atribuir el origen a quien, se supone, que es el autor o autora. Esto no es baladí y cada día se usa más en las marañas sociales, sobre todo a nivel de imágenes, postalitas, «frases para la eternidad», etcéteras… Lo dejo aquí escrito porque ya, como un granito de picadura de pulga, me venía hasta molestando, y todo tiene que ser dicho, que quede claro, para que, como siempre, no atribuyan a los de «siempre», eso de la «mátrix», el control de los poderosos y lagartijos, etcéteras…, cosas que son de nuestra total cosecha y adhesión a la creencia fácil.